martes, 10 de abril de 2012

Poema triste

Tan hermosa como siempre tu sonrisa cayada
Me observa desde el camastro donde duermes tranquila.
De tu piel brota luz como brillantes pupilas
y sé que viajas por la noche estrellada.

Porque no dejas de dormir desde aquella madrugada,
donde tu belleza decidió no ser parte de mi día
y te raptaron lejos de mi vida en armonía
y me dijeron que no sufriera ni desesperara.

Esta vez sin más, a horas tempranas
¿dónde se ha ido tu respirar esperanzador?
A tu piel se le ha esfumado el color.
Y se ha callado el electrocardiograma.